Hoy el barrio ha amanecido blanco. Pero no blanco por la nieve, blanco por la sal.
Al parecer el ayuntamiento ha echado 200 toneladas de sal al suelo para evitar los efectos del hielo y la nieve.
Esto se suma a la cantidad echada hace dos semanas.
El impacto ambiental no debe ser muy sostenible.
Cuando Roma destruyó Cartago, echó menos cantidad de sal…